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Esguinces de tobillo: ¿cómo tratarlos?

Los esguinces de tobillo son una de las lesiones más frecuentes que tiene un deportista, pero también es una lesión que sucede con mucha frecuencia en la vida cotidiana por apoyar incorrectamente el pie al caminar.
Un esguince es una lesión del ligamento que abarca desde una simple distensión hasta la rotura total del mismo, éstos ocurren de forma más frecuente, en la parte externa o lateral del tobillo. Si el grado de lesión es mayor puede ir acompañado de una lesión del hueso del peroné o del astrágalo y el grado de la lesión ósea también puede variar desde una fisura hasta una fractura.
Desde Fisioalmat, explicamos las consecuencias de un esguince de tobillo, y la mejor manera de tratarlo para curarlo de manera completa.

CAUSAS DE UN ESGUINCE DE TOBILLO

Independientemente de otras lesiones, estas se pueden dar de forma accidental donde se produce una torcedura del tobillo por un mal apoyo o traumática derivada normalmente de la práctica de deportes con impacto (futbol, baloncesto rugby etc.), y como consecuencia de un hecho específico, como puede ser, un estiramiento que sobrepase el límite de elasticidad normal del ligamento, ya que, es éste el primero que capta el estiramiento al cual pueden someterse las articulaciones.

Las causas por las que se producen esguinces de tobillo por un mal apoyo están relacionadas con una debilidad de la musculatura de los peroneos y del triceps sural (gemelos y sóleo) y por malas pisadas en terreno irregular (correr por montaña, una fuerte caída en la que se fuerce el tobillo, pisar mal después de un giro o salto.
Sin embargo los esguinces derivados de una lesión traumática irán relacionados con los llamados deportes de contacto tras recibir un traumatismo. Los ejemplos más comunes son: por una entrada en el fútbol con el pie apoyado o los traumatismos en el pie tras una caída de bicicleta.

Tipos de esguince de tobillo

Los tipos de esguinces de tobillo se clasifican según el grado de lesión que sea, y éstos son:

  • Esguince de tobillo de Grado 1. Es el más leve de todos. En estos esguinces se puede producir una rotura del 5% de las fibras del ligamento. El aspecto del pie será de una inflamación en la zona de la lesión y no irá acompañada de hematoma.
  • Esguince de tobillo de Grado 2. Se produce una rotura del 40-50% de las fibras del ligamento. La inflamación será mayor e irá acompañado de hematoma.
  • Esguince de tobillo de Grado 3. Se produce una rotura total del ligamento. Puede ser quirúrgico pero dependiendo de la actividad y de la estabilidad del pie a veces no se opera.

Es muy importante personalizar los tratamientos y no protocolarizar los tiempos de recuperación ya que hay muchos factores intrínsecos y extrínsecos a tener en cuenta ( edad, peso, alimentación, hidratación, hábitos de vida, etc.)
No podemos olvidar acudir a nuestro fisioterapeuta especializado al día siguiente de realizarnos la lesión ya que hoy en día los fisioterapeutas cuentan con técnicas de tratamiento que acortarán los plazos de recuperación consiguiendo además una correcta cicatrización desde el primer momento.

Prevenir los esguinces de tobillo

Como en cualquier lesión, la prevención es el mejor tratamiento para las lesiones, por esta razón te traemos unos consejos para que puedas prevenir un esguince de tobillo:

  • Un buen calentamiento. Un buen calentamiento le dará a las articulaciones la preparación que éstas necesitan para evitar cualquier incidente. Es bueno poder aplicar algunos ejercicios en base a la actividad deportiva que se va a desempeñar.
  • Propiocepción del tobillo. Un trabajo propioceptivo es cada vez más habitual entre las actividades deportivas. Se puede definir como un proceso necesario para preparar las articulaciones ante los mecanismos de una posible lesión.
  • Uso de un buen calzado deportivo. Cuando un esguince se produce al practicar algún deporte hay que tener en cuenta que muchas de estas lesiones son debido al uso de un calzado inadecuado. Por esta razón, el calzado que uses debe adecuarse el tipo de pisada, al terreno en el que se usen y al peso de la persona.
  • Potenciación muscular: Realizar una o dos sesiones a la semana de fortalecimiento de la musculatura de miembros inferiores reforzará la estabilidad del pie.

Tratamiento para un esguince de tobillo desde la fisioterapia

Cabe destacar que si no tienes conocimiento alguno de cómo tratar los esguinces de tobillo, lo mejor es que acudas a tu fisioterapeuta de confianza para ser atendido, ya que auto-medicarse o aplicar algún tipo de presión en el área perjudicada puede resultar peor.
Estos son algunos de los tratamientos de fisioterapia que se pueden aplicar en caso de sufrir un esguince de tobillo:

  • Aplicar frío en el tobillo: en sesiones de 15 a 20 minutos con sus respectivos descanso de 2 horas se pueden aplicar sesiones de frío que permitan aliviar el dolor, y disminuir la inflamación.
  • Vendaje neuromuscular: Puede ayudar a disminuir considerablemente la inflamación.
  • Terapia manual: Es la parte más importante ya que al producirse un esguince no solo sufre el ligamento, sino que se producen unos cambios biomecánicos a nivel articular que si no son tratados por un fisioterapeuta con experiencia en estas lesiones, desencadenará en el conocido como esguince crónico o recidivante.
  • Electroterapia: La electroterapia que nosotros utilizamos es la radiofrecuencia que bien utilizada acelera el proceso de reparación de la lesión.
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