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El amplio mundo de las contracturas musculares, cómo aliviarlas con fisioterapia

¿Quién no ha sentido alguna vez las molestias que produce una contractura muscular?

En Fisioalmat te contamos las causas que generan contracturas musculares y el importante rol que cumple la fisioterapia para una óptima recuperación.  

QUE SON LAS CONTRACTURAS MUSCULARES Y A QUIENES AFECTAN

Una contractura muscular se produce cuando se contrae un músculo. 

El músculo aumenta su tensión y, en consecuencia, hay un acortamiento de sus fibras. 

También puede ocurrir debido al aumento del tono muscular, que ha pasado de un estado de reposo a uno de trabajo. 

La zona suele estar hinchada o con un bulto, que conocemos como “nudo”. 

Cuando genera dolor y es persistente, recibe el nombre de contractura. 

Una contractura muscular es una lesión cada vez más frecuente en las personas y se puede dar a cualquier edad.  

El ritmo de vida actual, el sedentarismo, el estrés laboral, la falta de ejercicio y una mala postura son factores que contribuyen a padecer esta dolencia.

Si bien no es una lesión grave, produce molestias y, en algunos casos, puede impedir realizar tareas sin sentir dolor. 

Las contracturas musculares prevalecen en adultos jóvenes por encima de los 20 años, debido a que suelen ser más competitivos, realizan más deporte y soportan una gran carga tensional.

Incluso existen estadísticas vinculadas a grupos generacionales referidas a la localización de contracturas musculares. 

Por ejemplo, en varones jóvenes y deportistas, se asocian contracturas en musculatura isquiotibial, fascia lata y zona dorsal. 

En las mujeres es habitual que aparezcan contracturas en hombros, cervicales y diafragma.

A su vez, es llamativo el aumento de casos de niños en edad escolar que consultan por contracturas en la zona cervical. 

CAUSAS QUE PUEDEN PRODUCIR CONTRACTURAS MUSCULARES

Entre las principales causas que pueden producir contracturas musculares, podemos destacar las siguientes: 

  • Someter al músculo a un esfuerzo superior al que es capaz de tolerar.
  • El músculo está debilitado y no responde a las actividades diarias de manera óptima, aunque no requieran de esfuerzo.
  • Llevar una vida muy sedentaria.
  • Realizar posturas inadecuadas y repetitivas. Por ejemplo, mirar el móvil con la cabeza muy baja. 
  • La ansiedad y el estrés producen elementos químicos que hacen que los músculos se contraigan.

CONTRACTURAS MUSCULARES SEGUN SU ORIGEN

Podemos distinguir las contracturas musculares según su origen. Entre ellas, encontramos las siguientes: 

Contracturas defensivas o postraumáticas. Son aquellas que se producen tras un impacto. 

A modo de respuesta, el cerebro activa la musculatura adyacente para preservar las estructuras sensibles.

En general, son contracturas de carácter rígido y con fuerte dolor, pero desaparecen prácticamente solas después de 48 o 72 horas. 

Dentro de este grupo encontramos las contracturas cervicales.

  • Contracturas posturales. Estas lesiones se generan de manera lenta y progresiva debido a malas posturas. 

No suelen producir mucho dolor, a menos que se asocien con otros músculos cercanos. 

En este grupo se incluyen los típicos nudos en el cuello.

  • Contracturas por hipotonía. Aparecen cuando el músculo está debilitado y le pedimos una contracción más fuerte. 

Entonces, genera una contractura para evitar la rotura de fibras. Estas contracturas suelen ocurrir con la práctica deportiva.

  • Contracturas por deshidratación. Este tipo de lesión produce una contractura en el esternocleidomastoideo tras una ingesta pronunciada de alcohol. 

Pueden aparecer episodios de tortícolis debido a la deshidratación de dicho músculo y acumulación de sustancias tóxicas que producen rigidez cervical y dolor al movimiento, así como mareo y dolor de cabeza.

Los síntomas varían de una persona a otra y ninguna es de carácter grave.

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PREVENCION Y TRATAMIENTO DE CONTRACTURAS MUSCULARES CON FISIOTERAPIA

Recuerda que el mejor tratamiento se basa en la prevención. 

Para ello, lo primero que debemos de hacer es adoptar buenas posturas corporales, ya que la mayor parte de las contracturas se producen por malos hábitos mantenidos en el tiempo. 

Si tus actividades diarias requieren permanecer muchas horas en posición sentada o parada, lo recomendable es que realices estiramientos cada hora para prevenir las contracturas.

En cuanto a las actividades deportivas, es fundamental realizar un adecuado calentamiento y una vuelta a la calma con estiramientos y reposo de los músculos. 

Aunque, si ya tenemos la contractura muscular, tendremos que tratarla. 

Para ello, podemos recurrir a la ayuda de expertos en fisioterapia para que realicen un diagnóstico y saber cuál es tratamiento ideal en nuestro caso particular. 

El masaje terapéutico manual es la mejor manera de eliminar contracturas musculares y mejorar nuestra calidad de vida. 

Gracias a la regularidad y la frecuencia se logran cambios estructurales en el cuerpo.

En la actualidad, el tratamiento se puede combinar con otras técnicas como la punción seca, la tecnología Indiba, los estiramientos, etc. para obtener resultados más rápidos y efectivos. 

Si sufres de una contractura muscular o quieres simplemente prevenir este tipo de lesión, en Fisioalmat contamos con un equipo de especialistas en fisioterapia y osteopatía capaces de brindar a tu cuerpo todo lo que necesita. 

Esperamos con agrado tu consulta.

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